Aunque muchas comunidades marginadas se enfrentan al racismo, la discriminación, la inestabilidad financiera y otras barreras estructurales, estas mismas comunidades son lugares de alegría, resistencia y celebración. Comunidades como el barrio de Casa Blanca, en Riverside, California, formaron sólidas redes a través de la iglesia, los deportes, el servicio militar y las celebraciones culturales. Por ejemplo, cada Cinco de Mayo Casa Blanca celebraba una fiesta que incluía un concurso de belleza. Otros eventos comunitarios honraron a los veteranos o a instituciones como la Logia AHA no. 8.